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APOCALIPSIS 12 - Reina Valera 2020 bible

APOCALIPSIS 12

¹Apareció en el cielo una grandiosa señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies y con una corona de doce estrellas en su cabeza.

²Estaba embarazada y gritaba por los dolores del parto, por la angustia del alumbramiento.

³Luego apareció otra señal en el cielo: un enorme dragón rojo que tenía siete cabezas y diez cuernos, y con una diadema en cada una de sus siete cabezas.

⁴Su cola arrastró con violencia la tercera parte de las estrellas del cielo y las arrojó sobre la tierra. El dragón se plantó frente a la mujer que estaba de parto, dispuesto a devorar a su hijo en cuanto naciera.

⁵La mujer dio a luz un hijo varón, que gobernará a todas las naciones con cetro de hierro. Pero su hijo le fue arrebatado para Dios y para su trono.

⁶La mujer huyó al desierto, donde tenía un lugar preparado por Dios para que allí la mantuvieran por mil doscientos sesenta días.

⁷Entonces hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón. Luchaban el dragón y sus ángeles,

⁸pero no pudieron vencer, y ya no hubo más lugar para ellos en el cielo.

⁹Y así fue expulsado el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama Diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero. Tanto él como sus ángeles fueron arrojados a la tierra.

¹⁰Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: —Ahora ha venido la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios y la autoridad de su Cristo, porque ha sido expulsado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche.

¹¹Ellos mismos lo han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra de testimonio que dieron; pues menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

¹²Por lo cual alegraos, cielos, y los que habitáis en ellos. ¡Ay de los habitantes de la tierra y del mar!, porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, pues sabe que tiene poco tiempo.

¹³Cuando el dragón vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón.

¹⁴Pero a la mujer se le dieron las dos alas de la gran águila para que volara al desierto, lejos de la serpiente, al lugar donde sería mantenida durante tres años y medio.

¹⁵Entonces la serpiente arrojó mucha agua por su boca, como si fuera un río, para que la mujer fuera arrastrada por la corriente.

¹⁶Pero la tierra ayudó a la mujer, pues la tierra abrió su boca y se tragó el río que el dragón había arrojado por su boca.

¹⁷Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer y se fue a hacer la guerra contra el resto de la descendencia de ella, contra los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo.

¹⁸Y yo me paré sobre la arena del mar.